¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

16°
2 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Las fuerzas del cielo, un relato a medias

Viernes, 19 de abril de 2024 01:56

"Veo los peligros de la vida presente; peligro en el mar, peligro en la tierra y peligro en los falsos hermanos"

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

"Veo los peligros de la vida presente; peligro en el mar, peligro en la tierra y peligro en los falsos hermanos"

San Pablo, el Apóstol de los gentiles.

En épocas donde los dirigentes se vanaglorian de instalar frases rimbombantes, momentos donde el reduccionismo paga dividendos y donde la estrategia es aparentar tener una extensión cultural de un océano, pero ocultar que se tiene la profundidad de un charco… y aparecen hasta en los marketineros gorritos de…"las fuerzas del cielo."

¿Profundizamos?

Las sagradas escrituras siempre son el escondite predilecto de los mesiánicos y también de los metafísicos que no ahorran en análisis conspiranoides.

El triunfo de Judas, el Macabeo

Desde un motivante "Yo no vine acá a guiar corderos. Vine a despertar leones". Se utiliza esta referencia de una manera magistral… ¿Quién quiere se cordero? ¿Y quién no quiere ser león? Es tan simple la convocatoria, que da vértigo asomarse al abismo de semejante simplificación. Una verdadera arenga de vestuario futbolista.

¿Ya no nos acordamos del… Cordero de Dios que quita los pecados del mundo?

La frase que pusieron de moda, "las fuerzas del cielo" es vergonzosamente, una autentica simplificación de una reducción, para hacer entendible que… no importa si somos pocos, lo realmente importante… es la colaboración celestial metafísica que llegara para triunfar.

¿Contextualizamos?

Macabeos, versículo 18: Judas respondió: "Es fácil que una gran multitud caiga en poder de unos pocos, pues para Dios lo mismo es dar la victoria con muchos que con pocos".

Y el versículo 19: "En una batalla, la victoria no depende del número de los soldados, sino de la fuerza que emana de Dios"

Son dos versículos de una fuerza poderosa, pero, es una pequeña parte, muy pequeña de una historia, donde prosiguen dolores, guerras, conflictos, sacrificios superlativos de un sector social, mayoritariamente… cordero.

Para los que no lo saben, se trata de una cita del libro los Macabeos, que hace referencia a la gran resistencia del movimiento judío de liberación que se plantó ante los invasores griegos, en el año 166 a.C.

"Yo no vine acá a guiar corderos. Vine a despertar leones".

Si dejamos de creer en fotos y profundizamos en el desarrollo en la gesta de los macabeos, podríamos descubrir que aquella rebelión, terminó en el advenimiento de la dinastía de los Asmoneos, quienes en el tiempo se rindieron, con gusto ante las mieles del soborno, de la avaricia, de acumular tierras y se convirtieron en subyugadores seriales.

Al final «las fuerzas del cielo" terminaron generando la banda de los Asmoneos, auténticos religiosos corruptos, que se aliaron a los conquistadores de turno. Como cualquier grupo cipayo. Y así Roma, con las fuerzas de la tierra terminaron sometiendo al pueblo judío. Toda una historia para explorar o un pronóstico a esperar.

íA no comerse el caramelo envuelto! Reflexionemos: ¿Somos libres de verdad?

 

PUBLICIDAD